post viejos parte 2

Un día como hoy… pero con aceite de oliva, Genital, el Profuso, antes de cantar su famosa “Zamba de mierda” en el Folk Festival Of Punta Pete, fue herido de muerte por su guitarrista acompañante, El Tuerto Peñalba (de copioso prontuario), quien lo confundió con los azules al oírlo decir: “Me va a tener que acompañar, Tuerto”

Un día como hoy… pero en Mi Mayor (difícil pa’ trompetista), Genital, el Engolado, cantó por última vez… a pedido del público, en la Biblioteca Nazarena Vélez de Punta Pete. En “El Diario Sufrir” la crítica resaltó: “Sus grandes fracasos ’Tá re buena la petisa’ y ‘Sin puchos y con diarrea’ emocionaron al público cuando Engolado dejó de cantar. Su carrera fue como un pedo en un ascensor: corta, pero molesta”

Un día como hoy...¡igualito!...Genital, el Orgásmico, se convirtió en el primer atleta miope en ganar los 5.000 metros con un faso en la boca y en ojotas, en el marco de las Primeras Olimpíadas Hippies “Por la paz: ¡Todos en Pelotas!”. El segundo puesto quedó vacante y en tercer lugar llegó un dragón azul (aunque su inscripción no consta en actas).

Un día como hoy… pero con silencio de fusa, Genital, el Amatorio, nadó 1.323 metros en seis horas, batiendo el récord mundial de pileta de lona en su Pelopincho verde oliva. Al culminar su proeza exclamó: “¡La reputa madre, cómo me arden los ojos!”

Un día como hoy… pero crescendo, Genital, el Espurio, durante los festejos por la independencia de Punta Pete, tuvo la infeliz idea de bailar lambada con la Madre Superiora del Convento de las Doncellas Desesperadas. Ella descubrió la naturaleza varonil del Espurio y lo expulsó del internado de señoritas.

Un día como hoy… pero con un sonido de mierda, Genital, el Sibilino, protagonizó el mayor atraco de la historia de Punta Pete, tras comerse media horma de queso gruyere y un guiso de arroz con lentejas.

Un día como hoy… ¿pero qué pasa que no bailan?, Genital, el Arisco, quedó eliminado en el primer concurso de la Academia Nacional de Canto de Protesta “Amalia Granata” de Punta Pete. Cuando presentó su canción “¿Qué mirás, imbécil?” provocó la ira del Jurado, que no dudó en protestar por su inclusión en el certamen.

Un día como hoy… pero con distorsión a full, Genital, el Fecundo, se reunió con el General Perón. Tras los saludos de rigor, el Fecundo le dijo: “Mire General que lo he leído más de diez veces, ¡pero su tercera posición no aparece en el Kama Sutra!”

Un día como hoy… pero en clave de fa, Genital, el Despepitado, se encadenó desnudo en la plaza mayor de Punta Pete, al grito de: “¡Liberen las ballenas, liberen las ballenas!”. Ni la policía, ni el Gran Alcaucil pudieron convencerlo de deponer su actitud. La única que consiguió acabar con la protesta fue la presidenta de las Damas Vetustas en Oferta, que amenazó al Despepitado con darle placer en público.